texto argumentativo: Amarse a si mismo
Para Amarme, debo aprender que es el amor que se busca al final del sendero, de poder lograr interiorizar esta palabra que se ve tan sencilla pero que se hace tan compleja porque la verdadera búsqueda es encontrar por medio de ella la felicidad y solo amándome puedo amar a los demás y este es el verdadero camino que lleva a cualquier ser humano a encontrar esta felicidad.
El aprender amarse a uno mismo nos lleva tener un comportamiento donde la sinceridad nos permita ser transparente , sin engañarnos, con un corazón humilde, para tener la valentía cuando nos equivocamos y seguir adelante para aprender de estos , respetarnos y creer en uno mismo sin egoísmo y confiar que somos capaces de lograr metas .
El amor, cuatro letras nada más que significa: dar lo que tengo dentro de mi corazón, es que amarme es sentirme en plenitud, por ello cuando logro esto puedo realmente amar a otra persona con alegría aceptándola con sus defectos y cualidades que es diferente a mí, es que amar de verdad nos permite tener una sabiduría de las cosas, amar es sanar, revitalizar la mente y el corazón de quien por ello recibimos tanto cuando aprendemos a darlo.
Aquí vale la pena mencionar la expresión del filosofo Darío Lostado "¿Si no te amas tú, quién te amará?” “¿Si no te amas a tí, a quién amaras?". Esto lo mencionó para decir una frase muy conocida: no hagas con los demás lo que no quieres que hagan contigo y es allí el punto esencial, cuando uno se ama realmente no puede llegar agredirse a si mismo, por lo tanto, no podría andar por la vida dañanando a los demás.
Una Vida feliz, no consiste en al afán de lo bienes, sino en aprender a ejercitar la virtud y los valores que le son propios al hombre. Para hacerse cargo de todo, es preciso ver las cosas desde adentro de nosotros mismos, de una manera más vital y práctica, más "interior".
La felicidad es poseer una armonía consigo mismo, que es la que muchas veces permite afrontar las dificultades sin sentirse infelices, también no admite aceptar modelos que no sean los personales.
Para concluir podemos decir que cuando realmente aprendemos a amarnos, podemos amar a los demás seres humanos, que cuando encontramos la felicidad estamos en un estado consciente de ser y crecer. Implica equilibrio interno y sintonía con el mundo que nos rodea. Felicidad, entonces, es vivir en armonía interna y externa, de acuerdo a nuestra particular y específica condición humana.
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